Nueva ley del aborto: Rajoy abraza el zapaterismo

Yo aquí queriendo escribir un artículo de Navidad, y va el gobierno y me obliga a cambiar la agenda. Ains. Sin embargo, creo que es importante comentar esta nueva ley del aborto. No sólo por la ley en sí (que también), ni por ser un enésimo intento de practicar ingeniería social.  Hay una cuestión soterrada adicional: puede que Zapatero haya muerto electoralmente, pero se ve que el virus del Zapaterismo ha infectado a toda la clase política española, empezando por su (supuesto) némesis, el señor Mariano Rajoy Brey. ¿Cómo dicen, que qué tiene que ver la ley del aborto con esto? ¿Estás fumado, Ikael? ¿Cómo que esto es lo mismo que hizo Zapatero, si esta ley del aborto viene a ir en el sentido contrario? Bueno, pues sigan leyendo para entender por dónde va mi razonamiento.

Bueno, hay que tener en cuenta que nació como producto de la violación de su programa electoral

No se engañen, esta jugada política parte de la misma estrategia que impulsó la ley de aborto de Zapatero: coges un punto de partida razonable (como, pongamos, la ley de plazos) y le metes un añadido absurdo, radical y demencial para para polarizar a la sociedad (como, pongamos, lo de no necesitar informar a tus padres de que abortas con 16 años) y ya tienes el circo montado. Rajoy ha hecho exactamente la misma mierda, pero en versión de derechas: ha cogido la muy razonable legislación previa a Zapatero (la que estuvo vigente hasta el año 2010, vaya), y le ha al incluido dos triquiñuelas sacadas del manual del pequeño bastardo para que se salga de quicio: eliminar el supuesto de malformación del feto como causa válida para abortar, pero sobre todo, la necesidad de la doble autorización médica, medida que indefectiblemente llevará a un retraso en la autorización y que por ende, abocará a salir del plazo legal permitido a muchas embarazadas.

El efecto buscado en ambos casos es el mismo: generar crispación en la sociedad, generar un debate que les de una imagen de que ellos son "diferentes" a ojos de su electorado más radical para que así la gente no caiga en la cuenta de que, a pesar de esgrimir políticas sociales distintas, en términos de política económica, el PPSOE es exactamente la misma mierda. Más impuestos y recortes sociales para mantener vivo su chiringuito del tío Paquito. Eso sí, los cuatro hooligans que mantienen vivo el bipartidismo se sentirán muy satisfechos al ver que gobiernan para ellos a base de medidas de control social (otra de esas coincidencias entre PP y PSOE, ambos dos siempre deseando decir a la gente como vivir su vida) mientras que el grueso de electores que no está tan radicalizado ni les interesa recrear la guerra civil una y otra vez cada cuatro años, abandonan toda esperanza, asqueados por nuestro sistema politico, marginados por el mismo. Esta ley del aborto viene a confirmar que nuestros políticos gobiernan para fanáticos, que son los que nunca fallan en las urnas y los que gritan más fuerte para tapar las vergüenzas de nuestros gobernantes. Y sí, Rajoy, "el moderao", con leyes como esta, está haciendo tres cuartas partes de lo mismo, que esto no estaba ni si quiera en su programa electoral, que ya era conservador de por sí. Bienvenidos a la zapaterización de la derecha. Bienvenidos a la radicalización de las políticas sociales para obtener una mejor cortina de humo con la que tapar la miseria de su política económica.

Llegados a este punto, me espero lo peor: otro rescate bancario, una nueva trama Gürtel, un tarifazo eléctrico adicional, un rescate del FMI, usar el dinero del fondo de pensiones para clonar a cyborgs de Adolf Hitler, no sé, sean imaginativos y pesimistas, y casi que de seguro acertarán, que esto no se va a quedar en esta ley.

"La crispación nos beneficia", se le oyó una vez a Zapatero cuando se dejó un micrófono abierto. Ahora también beneficia a Rajoy, no les quepa la más mínima duda. Nos tienen justo donde querían. Sí, en efecto, el aborto es un tema con chicha. Nadie lo trivializa ni lo niega. Pero no dejemos que les salga bien esta jugada, una vez más. No se merecen que les demos un respiro.

PD ¿Y qué opinas tú del aborto?: Pregunta inevitable cuando se habla de este tema. Pues verán, me considero liberal, en el sentido clásico de la palabra. Como tal, creo que el estado debe de existir para garantizar nuestra libertad, no para controlar nuestras vidas. Por lo tanto, Quiero que el estado saque sus dedos codiciosos de nuestros monederos, sí, pero también de la educación de nuestros hijos, del historial de nuestros navegadores web y, por supuesto, del útero de las mujeres. No me malinterpreten: no me gusta el aborto, no creo que siempre esté justificado (una vez más: ley de plazos) y personalmente, dudo de que me gustaría que abortara mi pareja, en el caso de quedar embarazada de penalty. Pero esas son mis creencias personales. No tengo ningún derecho a imponerlas a golpe de pistola o decreto ley sobre nadie. Ni si quiera aunque gane unas elecciones. Eso sí, a quien quiera que a título personal le hable de por qué creo que el aborto suele ser un error en la mayor parte de las ocasiones, estaré encantado. Pero esa es una cuestión íntima, para hablar y explicar a amigos o familiares tomando un té, con calma, mimo y convencimiento, no para meterla por el recto, sentencias judiciales en mano. Un gobernante primero debe ser gobernante, y luego persona, le pese a quien le pese.